27 de Febrero del 2009
Tres sujetos subieron a un taxi en el cen¬tro, le pidieron al chofer que los llevara hasta el barrio Juan Moreira y cuando llegaron a ese sector del oeste de Trelew, uno le pagó y al momento en que el taxista le iba a dar el vuelto le exigió que le entregara la recaudación, asegurándole que si no lo hacía lo quemaba. Se apoderaron de unos 300 pesos, bajaron del vehículo, huyeron hacia una cercana vivienda y la Policía nunca los pudo atrapar.Este episodio sucedió ayer a la mañana -momentos después de las ocho y media- en inmediaciones de las calles Telsen y Viedma. Y dicen que las autoridades de la Comisaría Tercera terminaron calificándolo como un «hurto simple» porque el taxista nunca dijo que había sido intimidado con algún arma de fuego.Al joven lo tomaron en la parada de 25 de Mayo y pasaje Tucumán y le habían dado ese destino. El, en declaraciones realizadas después a EL CHUBUT, aseguró que nunca llegó a sospechar que terminarían robándole de esa manera la recaudación que había hecho hasta ese momento.«Piden venir acá, al «Moreira 2», y justo venía un compañero detrás de mí», contó el taxista a este diario, mientras la Policía rodeaba la manzana y buscaba a los malvivientes, de los que se presumía en ese momento que se encontraban en una vivienda cercana al lugar donde se produjo el ilícito. ¿Nunca sospechaste hasta ese momento? se le consultó, a lo que respondió: «No. Yo venía sospechando, porque el de atrás se venía cubriendo y no podía verlo. Pero, como que me relajé cuando uno de ellos me pagó el viaje. Aparte, la esquina estaba lle¬na de gente esperando el colectivo, así que nunca me imaginé que me iban a robar», confesó.«Y cuando le fui a dar el cambio me dijo que me quede quieto o me quemaba. Yo no miré para ningún lado ni hice nada, como estaban los otros dos, y le di directamente la billetera», señaló.A la tarde la Policía realizó dos allanamientos en un par de domicilios cercanos al sitio donde había sucedido el robo, pero los resultados fueron infructuosos. No encontró ni siquiera la billetera.
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