martes, 31 de marzo de 2009

Un homicida visitó a parientes y fue custodiado por 8 policías y 3 móviles

24 de Marzo del 2009
Se distrae personal y patrulleros destinados ala prevención. El juez Alejandro Panizzi había dicho que con estas medidas "el Poder Judicial contribuye a la inseguridad". Presidirá el Superior Tribunal de Justicia.


Ocho policías, dos patrulleros y una camioneta policial, fue­ron necesarios ayer por la tar­de para custodiar a un peligroso suje­to condenado por un homicidio al que la jueza Amalia Ferrari autorizó para que visite a sus familiares habida cuenta del fallecimiento de un pa­riente.
La impresionante custodia obede­ció a que el individuo tiene antece­dentes de fugas en los lugares donde estuvo detenido por otros ilícitos. La salida se realizó ayer cerca de las 15 desde la Alcaidía dé Trelew hasta un domicilio de la calle Roque González al 700 del barrio INTA de Trelew. Por espacio de dos horas, los agentes de­bieron rodear el lugar teniendo en cuenta que a la vivienda solo ingresó un efectivo que debió quitarle las es­posas al homicida.
Se trata de Ezequiel Huenelaf con­denado a 12 años de prisión por un ho­micidio. Este tipo de medidas judicia­les, se producen al menos cinco veces por mes y obligan a la policía a dis­traer recursos humanos y logísticos destinados originalmente a la pre­vención de los delitos. A este tipo de decisión judicial, deben sumarse los llamados arrestos domiciliarios que también obligan a mantener las 24 horas del día a un policía en el exterior de la vivienda donde un juez dispuso que se debe cumplir la medida. Las dos circunstancias obligan a restar presencia policial en las calles.

Panizzi
Estas decisiones judiciales fueron cuestionadas por quien será próxima­mente presidente del Superior Tribu­nal de Justicia, el doctor Alejandro Pa­nizzi. El magistrado había manifesta­do en un reportaje que ese tipo de me­didas "contribuye a la inseguridad".La nota fue publicada por este Dia­rio en la edición del domingo pasado. Allí Panizzi dijo que "me parece que la Judicatura se equivoca a veces cuan­do, por ejemplo, decreta el arresto do­miciliario de un imputado y pone a dos policías a cuidar que no se escape de la casa, con lo cual saca dos policías de la calle. Es una de las formas de contribuir a la inseguridad por parte del Poder Judicial". Se cree que la jue­za Ferrari se amparó en leyes existen­tes para la medida que tomó.

El Dato

Panizzi también dijo: "Y después está el error común, que es equi­vocarse al sentenciar. A veces las investigaciones no son eficientes, entonces el hecho no logra escla­recerse. En eso también podemos hablar de un error o si se quiere, una contribu cíón a la inseguridad pública. Si un hecho queda impu­ne, se trata de una injusticia que se cornete dos veces. Cuando un hecho no logra probarse ante los estrados, no logra esclarecerse y no se obtiene una sentencia de culpabilidad, hay una ineficien-cia o un déficit del servicio de jus­ticia".

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