Dos encapuchados armados sorprendieron ayer a la madrugada a un playero y encañonándolo le robaron la recaudación, uno de ellos le pegó un culatazo en la espalda y huyeron en un nuevo asalto que ocurre en menos de dos meses en la estación de servicio de Entre Ríos y San Martín, en el barrio Malvinas Argentinas en Trelew. Tres horas antes a un taxista le pusieron un cuchillo en el cuello cerca de «Las Mil Viviendas» y le sacaron la plata.
Este caso sucedió cerca de ia una de la madrugada después que un individuo tomara un taxi en la parada de Edison y avenida
La Plata, le pidiera a su chofer que lo llevara hasta una calle que está en el límite entre los barrios Los Aromos y Constitución y al llegar a ese lugar sacó un cuchillo de regulares dimensiones, le apuntó al conductor y le exigió que le entregara la recaudación, huyendo con casi 200 pesos.
Este violento episodio como el de la estación de servicio ocurrieron en jurisdicción de la Comisaría Tercera, una dependencia que por estas horas está estrenando nuevos jefes.
«Hasta el celular me llevaron. Me llevaron todo». Así comenzó contándole a EL CHUBUT lo sucedido en «Petrofe», la estación de servicio de Entre Ríos y San Martín a la que por segunda vez en menos de dos meses asaltaron ayer a la madrugada, el playero que fue sorprendido por dos malvivientes que cubriendo sus rostros con capuchas y apuntándolo con revólveres, le terminaron llevando una suma cercana a los 900 pesos en efectivo.
Curiosamente, Paulino Araneda fue también víctima de aquel hecho acontecido casi llegando a fines del año pasado y hoy no descarta que quienes operaron ayer a la madrugada puedan llegar a ser los mismos. «Cuando entraron ni los vi. Eran dos que andaban armados con revólveres 22 y encapuchados. No se si andaban en auto o a pie», dijo Araneda.
Este diario le preguntó: ¿Estaba atendiendo a algún cliente en ese momento? «Recién había despachado un auto. Me llevaron toda la recaudación, pero sabían todo el movimiento de acá», contestó. ¿Y no hubo ningún testigo del hecho?, insistió EL CHUBUT, a lo que Paulino Araneda respondió: «No. Si el auto se iba cuando llegaron y me asaltaron.»
Seguidamente, explicó que los delincuentes eran «robustos, pero petizos» y al ser consultado si alguno de ellos le había dicho algo llamativo, que le llamó la atención, el playero dijo:»No. Que le diera la plata porque si no me hacían boleta. Vinieron acá adentro, a la oficina y sacaron toda la plata que tenía. Unos 800 ó 900 pesos se llevaron. Estaban toda la recaudación de la noche», detalló.
Finalmente contó que antes de irse del lugar uno de ellos le pegó un culatazo en la espalda e insistió que ignoraba si se escaparon en auto o a pie. «Salieron corriendo. No sé si los estaba esperando algún auto», concluyó Araneda.
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