Entran a negocio como clientes y terminan asaltando a la dueña

17 de Febrero del 2009

Al menos dos individuos entraron a una céntrica tienda de esta ciudad y su propietaria pensó que eran clientes. Cuando intentó atenderlos uno de ellos se le abalanzó, la agarró del pelo y la llevó a la fuerza para el fondo del nego­cio. Allí la dejó reducida, intimidándola para que se queda­ra en ese lugar, y con su cómplice se apoderaron de unos 700 pesos en efectivo, instantes antes de huir llevándose ade­más documentación de la víctima, sus tarjetas de crédito y el celular.
Los delincuentes actuaron disimulando sus rostros con anteojos oscuros y según la comerciante tendrían entre 19 y 22 años. El hecho, sucedió cerca de las tres de la tarde en jurisdicción de la Comisaría Tercera, en el radio céntrico de Trelew, sobre la calle 25 de Mayo al 1500, donde funciona la firma "Lacotex Outlet".
La víctima de ese suceso al hablar con EL CHUBUT le contó a este diario: "Entre las dos y tres de la tarde entraron dos personas. Fue muy rápido, en cinco minutos, buscaban el dinero que era lo que me pedían, y el celular. Así que les dije donde estaban; pero para esto uno de ellos ya me había llevado al fondo, me dijo que no me moviera de ahí. Y eso fue todo", dijo la comerciante.
¿Cómo eran estos sujetos? se le preguntó y contestó: "Perso­nas altas. Al único que pude ver es al que me agarró del pelo para llevarme al fondo. Después no pude ver más nada. Fue una cosa muy rápida", repitió.
"Cuando ingresaron estaba parada cerca del mostrador ha­ciendo un trabajo, los vi entrar, así que quise atenderlos porque creí que eran clientes, y ahí fue cuando uno de ellos me agarró del pelo y me hizo agachar la cabeza llevándome para el fondo", reiteró.
Luego detalló que junto a la plata de la que se apoderaron "estaba la cartera, pero sólo sacaron mi billetera con el car­net de conducir, las tarjetas de crédito y el celular", aclaró. Entonces se le consultó si se cubrían el rostro o habían come­tido el asalto a cara descubierta, a lo que contestó: "Sí, con anteojos oscuros. Uno estaba vestido con una campera negra con cierre en la parte de arriba, pero no alcancé a ver mu­cho", dijo.La mujer -quien reveló que es la primera vez que le toca vivir una situación realmente dramática como la de ayer- recordó que hace algunos meses ya había recibido "la visita" de los delin­cuentes, cuando una madrugada le desvalijaron el. negocio, en un hecho en el que los ladrones violentaron la puerta de acceso y se llevaron varias prendas de vestir.